Como casi cualquier sitio, Burgos, presenta mil opciones para comer o cenar. Siempre cuesta elegir. Seguramente nuestra elección no sería la mejor para las personas que prefieren otro tipo de cocina pero a mí me gustó y tengo un buen recuerdo tanto del sitio como de los platos que nos sirvieron.A pesar de que nos recomendaron otro restaurante, al final, por cosas del destino terminamos en el Restaurante 24 de la Paloma. Está situado en la calle peatonal que va a desembocar en la plaza de la catedral.
mE gustó especialmente el tartar de atún rojo y la merluza rellena de boletus ( y eso que a mí me chifla el solomillo pero no sé, últimamente soy muy fan del atún). Tampoco me defraudaron los postres, !!!vivan los golosos!!. No es un restaurante para llenarte el estómago y comer sin parar, ya que los platos no son muy abundantes pero a mí me gustó la experiencia.
Eso sí, menos mal que mis padres se hicieron cargo de la cuenta...así que por ello, gracias papá y mamá.
Mi falda joya de Zara fue un éxito. La verdad es que ha sido una compra ideal en estas rebajas. lAs cazadoras de cuero parece que continúan siendo un básico esta temporada, así que llevarme la mía de Mango a Burgos fue todo un acierto.
Cazadora cuero: Mango
Camisa negra: Mango 2014
Falda joya: Zara 2014
Botines: Zara 2013
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