Me encanta el mes de abril, es uno de mis meses favoritos. Algunos de mis recuerdos más queridos y de mis mejores experiencias vitales ocurrieron justamente este mismo mes hace ya 6 años. Desde entonces, me llena de energía y me renueva. Como ocurre casi siempre, mis recuerdos tienen nombre de persona, de ciudad e incluso un olor específico. Supongo que por eso, cuando estoy de bajón me gusta oler a la colonia que usaba esos días y mirar fotos de Lisboa.
Lisboa es una ciudad que me encanta, me gusta todo de ella, me gusta volver y caminar por sus calles, recorrer sus plazas, respirar su aire...me gusta encontrarme allí, olerme a mi colonia de Nina Ricci al atardecer paseando junto al Tajo. Mi colonia de la manzanita huele a lo que yo viví en Lisboa y Lisboa, en mis recuerdos, huele a Nina Ricci. Tranquilidad, alegría, paz, descanso, dulzura, ternura, aire limpio, mi mejor versión de mi misma...así huelen mis recuerdos, así huele esta colonia, así huelo yo cuando vuelvo a esa ciudad.
Me gusta saber que siempre puedo llevar un poquito de lo que yo siento en esta ciudad conmigo. Todo lo que evoca un buen olor, ¿verdad?. Ahora contemplo la acuarela que compré la última vez que estuve y vuelvo oler a Nina...vuelvo a tener 27 años.
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